miércoles, 13 de septiembre de 2017

USO DE LA SEDA DENTAL


 

Os vamos a hablar de la importancia de la seda dental, una gran aliada y olvidada por muchos pacientes

Uso correcto:

Enrollar la seda en torno a los dedos corazón.

Utilizar los dedos pulgar e índice para guiar la seda entre los dientes.

Haga pasar la seda alrededor de los laterales de cada diente, formando una «C». Esto le permitirá llegar al espacio entre las encías y los dientes.

Revísese las encías en el espejo mientras utiliza la seda dental. Y haga uso de ella al menos una vez al día antes del cepillado

- Las encías deben tener un aspecto firme y rosado. Si están rojas, hinchadas o sangran, consulte a su dentista.

No deje de pasar la seda dental si sus encías sangran.

-          El uso de seda puede mejorar la salud de sus encías y evitar que sangren.

 

Y no olviden cepillarse los dientes tres veces al día, fundamental antes del descanso nocturno.
 
Una imagen vale más que mil palabras:
 
 
Stetident os desea felices sonrisas

LA DIABETES Y LA SALUD BUCODENTAL.


Consejos de salud bucal para diabéticos:

Cuidar sus dientes en casa:

Cepíllese los dientes mínimo dos veces al día.

Utilice seda dental al menos una vez al día para mantener los espacios interdentales libres de restos o acumulación de placa

Acuda a revisiones dentales cada 6 meses e Informe a su dentista que padece diabetes.

Realícese  limpiezas dentales de forma habitual cada seis meses (o con más frecuencia si lo indica su dentista).

Consulte a su dentista si observa síntomas de enfermedad periodontal, como sangrado e hinchazón.

 La diabetes puede afectar a muchas partes del organismo, incluyendo sus dientes y encías y el efecto es mayor si su glucemia no está bien controlada. La salud bucal también puede afectar a la diabetes. Se trata de una relación bidireccional.
 
Si su glucemia no está controlada, es posible que tenga más bacterias en la placa (película pegajosa de bacterias que se forma sobre los dientes y encías) que la mayoría de personas. Esto significa que tiene un mayor riesgo de tener problemas de salud bucal. Si padece diabetes su organismo tiene más dificultades para controlar las bacterias de la placa, por este motivo, los diabéticos tienen una probabilidad de 3 a 4 veces mayor de contraer enfermedad periodontal,  también conocida como piorrea. Con el tiempo puede provocar una retracción de las encías, que conlleva la pérdida del hueso que sostiene los dientes. Esto puede hacer que los dientes se muevan y con el tiempo acabe perdiendo las piezas. Es crucial que consulte a su dentista si tiene las encías rojas, hinchadas, doloridas o que sangran con facilidad y por supuesto tenga controlada siempre su glucosa.